Ante esta catástrofe de proporciones colosales, pido encarecidamente a la comunidad internacional que muestre a los pueblos de Türkiye y Siria el mismo tipo de apoyo y generosidad con el que recibieron, protegieron y asistieron a millones de refugiados y desplazados en una enorme muestra de solidaridad”.
António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas
Terremoto de Türkiye y Syria
Un devastador terremoto de magnitud 7,8 cerca de la frontera entre Türkiye y Siria azotó ambos países en la madrugada del lunes 6 de febrero de 2023, al que siguió otro de casi igual de igual magnitud. Los seísmos que sacudieron Türkiye y Siria provocaron una de las mayores catástrofes que han afectado a la región en los últimos tiempos. Decenas de miles de personas han muerto y muchas más han resultado heridas. Miles de edificios han quedado destruido y dejado expuestas a innumerables personas a las implacables condiciones invernales. Escuelas y hospitales han quedado destrozados.
Los seísmos se han producido en el peor momento de la crisis humanitaria en el noroeste de Siria desde que comenzó el conflicto, en la primavera de 2011, con 4,1 millones de personas que dependen de la ayuda humanitaria para subsistir.
Respuesta sobre el terreno
Las Naciones Unidas y sus organismos han desplegado sobre el terreno expertos en evaluación de catástrofes, están coordinanndo equipos de búsqueda y rescate y proporcionando ayuda de emergencia, alimentos, suministros médicos, mantas térmicas y otros artículos vitales. Los convoyes de la ONU han cruzado el norte de Siria a través del paso fronterizo de Bab al-Hawa, para facilitar refugio y suministros de socorro.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha enviado suministros sanitarios para atender a 400.000 personas afectadas por el terremoto. El organismo advierte que es necesario restablecer rápidamente los servicios sanitarios para evitar una catástrofe secundaria que pueda perjudicar a muchas más personas.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, por su parte, distribuye asistencia alimentaria que ha llegado ya casi a 1,7 millones de personas en los dos países.
Recuperación temprana
Con innumerables edificios destruidos, las primeras estimaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) indican que solo en Turquía será necesario retirar hasta 210 millones de toneladas de escombros. La superficie estimada de escombros abarcaría un área de diez por diez quilómetros,el equivalente a 14.000 campos de fútbol cubiertos de escombros apilados a un metro de altura. La destrucción ha dejado sin hogar a 1,5 millones de personas y será necesaria la construcción de 500.000 nuevas viviendas. El Programa de Desarrollo ayuda al Gobierno a retirar los escombros en primer lugar, despejando el camino para apoyar las entregas vitales de alimentos, agua y otros suministros, y para empezar con las tareas de restablecer los medios de subsistencia y reactivar las peque?as empresas.
Financiación
Las Naciones Unidas han liberado 50 millones de dólares de su Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia destinados a la respuesta al terremoto.
El Secretario General, António Guterres, declaró que las Naciones Unidas se han comprometido a hacer mucho más. El 14 de febrero, la ONU hizo un llamamiento urgente para recaudar 397 millones de dólares para la población de Siria, devastada por el terremoto, que cubrirá un periodo de tres meses. El 16 de febrero, las Naciones Unidas lanzaron un llamamiento urgente de 1000 millones de dólares para proporcionar asistencia vital a 5,2 millones de personas en Türkiye, que cubriría hasta el mes de abril.